La Novia del Peje
Capital político
Por Adrián Rueda (Excelsior)
Corrían los primeros meses de Andrés Manuel López Obrador como jefe de Gobierno del Distrito Federal y al área de Comunicación Social llegó una jovencita de nombre Beatriz Gutiérrez Muller, quien se integró al equipo y tras unos meses se fue, nadie supo por qué.
Un año después regresó y fue nombrada subdirectora de Información de la misma área —tampoco nadie supo por qué—, pero con un sueldo superior a los 60 mil pesos mensuales, cosa anormal, pues su puesto estaba tasado en menos de la mitad. Ni modo, había órdenes de arriba.
Para entonces era vox populi que Gutiérrez Muller era alguien muy especial para López Obrador. En el gobierno se comentaba que era su novia, por lo que el tabasqueño decidió alejarla de los reflectores y hacerla su asesora, sin importar que con ello violara la Ley de Austeridad, que prohíbe más de cinco asesores por área; ella era la número seis.
Tan burda fue la jugada, que en el propio Gobierno del Distrito Federal se publicó durante meses en su página de internet la ilegal nómina, hasta que se dio cuenta del error y la retiró.
A quienes defienden a ultranza a López Obrador seguramente no les hace ruido el sueldazo que durante años pagaron los capitalinos a su novia Beatriz, lo cual está documentado por el propio Gobierno del DF, para los que exigen pruebas.
El pecado de El Peje no es que haya tenido una novia escondida aún cuando estaba casado, eso es cosa de cada quien. Lo que no se vale es que la mantuviera en la nómina y al mismo tiempo criticara los sueldazos del gabinete y la manutención de la señora Marta, que cuando menos era la esposa del presidente.
Pero eso no es todo, quienes afirman que los críticos de López Obrador son de derecha y hablan sin pruebas, pueden preguntarle al diputado perredista Alberto Trejo, presidente de la Comisión de Administración de la Asamblea Legislativa, cuántos millones del erario público desvió Andrés Manuel como jefe de Gobierno del DF, para su imagen.
La cifra es ofensiva para los pobres… votantes que tanto dice defender. Las cuentas indican que López Obrador gastó más de 2 mil millones de pesos en cultivar su imagen en los cinco años que fue jefe de Gobierno.
No son chismes ni versiones, está documentado y es tan real que el PRD impidió en dos ocasiones con su mayoría que César Yáñez, vocero del tabasqueño, compareciera en la Asamblea Legislativa para explicar el gasto.
Otro detallito se dio apenas la semana pasada en el auditorio Teopanzolco de Cuernavaca, donde el PRD organizó un acto de apoyo a su candidato a gobernador de Morelos, Fernando Martínez Cué, a fin de que pidiera el apoyo para AMLO. Las sillas para el evento llegaron de las delegaciones Gustavo A. Madero, Cuauhtémoc y Magdalena Contreras del Distrito Federal.
Los perredistas fueron tan cínicos o tan torpes que ni siquiera taparon la placa de inventario.
Los simpatizantes de Andrés Manuel, que son muchísimos, deberían ser más justos en su juicio sobre él. Nadie critica que lo apoyen, faltaba más, pero que sean realistas y que no nieguen que es un pillo, manipulador, mentiroso y ladrón como los demás, pero con la agravante de ser hipócrita.
Por cierto que los documentos que prueban sus raterías están en la Asamblea Legislativa a disposición de quien los solicite, porque en el Gobierno del DF no se los van a dar.
Por Adrián Rueda (Excelsior)
Corrían los primeros meses de Andrés Manuel López Obrador como jefe de Gobierno del Distrito Federal y al área de Comunicación Social llegó una jovencita de nombre Beatriz Gutiérrez Muller, quien se integró al equipo y tras unos meses se fue, nadie supo por qué.
Un año después regresó y fue nombrada subdirectora de Información de la misma área —tampoco nadie supo por qué—, pero con un sueldo superior a los 60 mil pesos mensuales, cosa anormal, pues su puesto estaba tasado en menos de la mitad. Ni modo, había órdenes de arriba.
Para entonces era vox populi que Gutiérrez Muller era alguien muy especial para López Obrador. En el gobierno se comentaba que era su novia, por lo que el tabasqueño decidió alejarla de los reflectores y hacerla su asesora, sin importar que con ello violara la Ley de Austeridad, que prohíbe más de cinco asesores por área; ella era la número seis.
Tan burda fue la jugada, que en el propio Gobierno del Distrito Federal se publicó durante meses en su página de internet la ilegal nómina, hasta que se dio cuenta del error y la retiró.
A quienes defienden a ultranza a López Obrador seguramente no les hace ruido el sueldazo que durante años pagaron los capitalinos a su novia Beatriz, lo cual está documentado por el propio Gobierno del DF, para los que exigen pruebas.
El pecado de El Peje no es que haya tenido una novia escondida aún cuando estaba casado, eso es cosa de cada quien. Lo que no se vale es que la mantuviera en la nómina y al mismo tiempo criticara los sueldazos del gabinete y la manutención de la señora Marta, que cuando menos era la esposa del presidente.
Pero eso no es todo, quienes afirman que los críticos de López Obrador son de derecha y hablan sin pruebas, pueden preguntarle al diputado perredista Alberto Trejo, presidente de la Comisión de Administración de la Asamblea Legislativa, cuántos millones del erario público desvió Andrés Manuel como jefe de Gobierno del DF, para su imagen.
La cifra es ofensiva para los pobres… votantes que tanto dice defender. Las cuentas indican que López Obrador gastó más de 2 mil millones de pesos en cultivar su imagen en los cinco años que fue jefe de Gobierno.
No son chismes ni versiones, está documentado y es tan real que el PRD impidió en dos ocasiones con su mayoría que César Yáñez, vocero del tabasqueño, compareciera en la Asamblea Legislativa para explicar el gasto.
Otro detallito se dio apenas la semana pasada en el auditorio Teopanzolco de Cuernavaca, donde el PRD organizó un acto de apoyo a su candidato a gobernador de Morelos, Fernando Martínez Cué, a fin de que pidiera el apoyo para AMLO. Las sillas para el evento llegaron de las delegaciones Gustavo A. Madero, Cuauhtémoc y Magdalena Contreras del Distrito Federal.
Los perredistas fueron tan cínicos o tan torpes que ni siquiera taparon la placa de inventario.
Hay fotos, documentos, video y denuncias, pero no hay problema porque se trata de López Obrador y si se le acusa de algo es complot.
Los simpatizantes de Andrés Manuel, que son muchísimos, deberían ser más justos en su juicio sobre él. Nadie critica que lo apoyen, faltaba más, pero que sean realistas y que no nieguen que es un pillo, manipulador, mentiroso y ladrón como los demás, pero con la agravante de ser hipócrita.
Por cierto que los documentos que prueban sus raterías están en la Asamblea Legislativa a disposición de quien los solicite, porque en el Gobierno del DF no se los van a dar.
1 Comments:
Que barbaro es ese peje de verdad 2 mil millones en 5 años para imagen es una burla, aqui los perredistas se quejan porque Fox se gasto 2 millones en promocion de programas sociales, pero 2 mil millones esa si es una mamada con el perdon de los demas lectores, es una mamada
Publicar un comentario
<< Home